ABUELAZGO
Osvaldo Igounet Sabrá el lector perdonar que la foto que ilustra esta nota tiene ya cuatro años -2015- cuando este escriba aún no lucía desmejorado por problemas de salud como en la actualidad cuando con 50 kilos menos no parezco ser muy fotogénico que digamos. Y también sabrán disculpar que en lugar de escribir sobre nuestra siempre palpitante actualidad le dedique este breve espacio a realizar algunas reflexiones sobre el abuelazgo dado que desde el 19 de octubre del 2018 con la llegada de mi nieta Sarita es mi nueva condición de vida. Reconozco que nunca imaginé que convertirse en abuelo resultara ser algo tan sensacional, había escuchado eso de muchas personas que al serlo hablaban maravillas de tal situación pero siempre supuse que exageraban. Que llevados por la alegría del nacimiento de una nieta o nieto multiplicaban por diez la felicidad del momento; y saben qué, estaba equivocado multiplicar por diez se qu...