ARGENCONDO; UN PAÍS DE PARADOJAS

Vivimos en Argentina, somos argentinos y por lo tanto contradictorios. Amamos a García Márquez porque somos la quinta esencia del realismo mágico, cualquier argento suelto por el país tiene una historia que reduce a la nada a los Buendía y cualquier pueblito perdido en la pampa húmeda se vuelve un Macondo incontrolado. Nos volvimos tan inesperados que hasta Funes el memorioso ya se olvidó de todo. 

         Arreglamos con Oxford pero felicitamos 

         a Vladímir Putin por las dudas, ¿viste?.

Ayer el presidente extendió hasta el 30 de agosto una cuarentena que dijo ya no existe.

Te aplica el artículo 205 del Código Penal si salis de tu casa sin permiso o vas a una reunión familiar y después te dice por televisión que si vas a juntarte con amigos no te olvides el barbijo.

Si vivís en Liniers el lunes podes jugar al tenis en el Ateneo de Versalles pero si sos de Lomas del Mirador no porque la pelotita contagia (Gollan dixit) y sólo está la Gral Paz de por medio.

Las clases presenciales están prohibidas en todo el país -con mucha lógica- pero los bingos y casinos están reabriendo -sin ninguna lógica- salvo que se crea que el estudio contagia y el juego no.

En los colectivos solo pueden viajar los trabajadores esenciales y llevando únicamente la mitad del pasaje pero si para el tren Sarmiento el estado manda micros de dos pisos y los revienta de pasajeros.

Kicillof y Larreta trabajan en conjunto aplicando la "sintonía fina" salvo que uno quiere cerrar todo y el otro no para de abrir a actividades. ¿Qué entenderán los políticos por sintonía fina?, se pregunta con razón la gente.

Los tres chiflados lo hicieron otra vez, extendieron el plazo de duración de algo que dicen ya no existe y para colmo esa fecha tampoco existe porque como ellos mismos ¿explicaron? durante sus discursos nada cambiará hasta que la vacuna esté disponible, con suerte, a principios del año que viene. 

El Covid-19 y el gobierno -todos- nos facilitan la vida y si no me creés mira: si querés tener clases andate a San Juan, si necesitas pasear a los chicos mudate a la Ciudad de Buenos Aires, si lo tuyo pasa por ir a comer una hamburguesa o tomarte un cafecito visita San Isidro, si tenes un peso para el turismo interno y sos bonaerense en Tandil los hoteles funcionan y si queres sentir la inolvidable sensación de burlar todas las reglas llegate hasta La Matanza, Florencio Varela o cualquiera otra ciudad del primer o segundo cordón del conurbano bonaerense. Finalmente si lo tuyo es el escolazo fuerte la Patagonia te espera y si te gusta el turismo internacional sin pasaporte ni DNI date una vuelta por Salta y Jujuy.

Decime ahora que el país está parado y vos no tenes libertad para hacer nada. Que manera de ser jodida y llorona que tenemos los argentos, quejosos porque es gratis nomas. 

Un último párrafo para Lionel Messi que donó 50 respiradores a hospitales y clínicas de Rosario de los cuales ya llegaron 32; Lio querido los 18 que faltan no los mandes para acá, mejor llévalos al Barca que con el 8 a 2 que se comieron ayer con los alemanes seguro los van a necesitar.

Osvaldo Igounet corresponsal

en el país del Nunca-Jamas

Igounet NOTICIAS/VdN 

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